Donde viven las damas salvajes. Aoko Matsuda.
Los fantasmas femeninos pueblan el imaginario de las leyendas japonesas. Mujeres que han sufrido lo indecible y vuelven como seres vengativos. En Donde viven las damas salvajes, Aoko Matsuda ha tomado todas estas leyendas yokai y las ha reinventado desde un punto de vista feminista. Una mirada nueva y fresca que suma a las leyendas un punto más atractivo e interesante.
Los fantasmas pueblan la realidad japonesa, se acercan a su historia para ilustrar, moralizar o advertir a los pobres que los sufren, pero también nos muestran la riqueza de la cultura japonesa. Lo cierto, es que la gran mayoría de esas leyendas, dejan a la mujer no en un papel muy agradable, para que negarlo. Así que esta reinterpretación que ha hecho Aoko Matsuda es un soplo de aire fresco para aquellas personas que disfrutan del folklore japonés.

En Donde viven las damas salvajes, destaca el carácter reivindicativo de algunas de las historias. La autora critica en sus relatos el acoso sexual, la falta de autoestima, la presión social por el físico o por cómo debe comportarse una mujer. Y lo hace todo a través de los fantasmas que pueblan sus páginas. Desde una tía entrometida que viene a advertirle a su sobrina que deje de depilarse el cuerpo entero por un hombre, pasando por un fantasma que se dedica a cuidar a los hijos de una mujer divorciada mientras esta trabaja porque no tiene con quien dejarlos, hasta esa fábrica de inciensos misteriosos que hacen algo más que dar olor. Me han encantado especialmente “Mi amado” donde una joven con rinitis alérgica, no percibe el aroma del incienso que enciende en el altar de casa para rendir homenaje a sus ancestros desaparecidos.
Son relatos muy originales, que le dan la vuelta a los mitos desde un punto de vista muy necesario y que nos regalan una nueva visión de ellos, quizás esa desde la que se ve la muerte no como un final, sino como un nuevo comiendo.
Otra cosa a destacar de la edición de Quaterni es que la traductora, Juliana Buriticá Alzate, ha añadido las notas que hizo la traductora de la edición inglesa que ponían en contexto las leyendas en las que se basaban los relatos. Así, delante de cada cuento, tenemos su pareja tradicional, la leyenda de la que surgió y que inspiró a la autora. Algo muy útil si desconoces la leyenda original y que no aparecía en el libro japonés. Allí conocen las leyendas de sobra como para necesitar explicación. A un público que no esté familiarizado con ellas, le será muy útil. Un dato que conocí, gracias a la gran divulgadora que es Glady Juria. Este libro lo leímos en uno de sus talleres club de lectura que hace para la librería La fabulosa y que os recomiendo encarecidamente. A Glady siempre le gusta destacar y dar la merecida importancia a las traducciones directas. Teniendo aquí tantas y tan buenas traductoras del idioma original, que las editoriales apuesten por traducción indirectas va en detrimento de las personas que leen los libros. En este caso tenemos una traducción directa del japonés. Y eso se agradece.
