Mi relación con la comida, de Angélica Liddell
Mi relación con la comida 20-29 de marzo Plataforma I+D Dirección de Pau de Nut Interpretado por Sonia Espinosa y Adeline Flaun El fin de semana pasada, Culturaca se pasó por el teatro PLATAFORMA i+d, propiedad de la escuela de teatro Eòlia, para ver la última producción de la compañía ALMARADAS, a la que entrevistamos hace poco. Se trata de Mi relación con la comida, obra de la dramaturga Angélica Liddell. Mi relación con la comida nos presenta una voz contemporánea preocupada por la desigualdad social y económica, que caracteriza un mundo regido por sistemas políticos que permiten la convivencia del lujo junto a la miseria. Fue un texto galardonado en el 2004 con el XIII Premio SGAE de Teatro, pero que ella misma no ha representado nunca hasta que Pau de Nut y Sonia Espinosa decidieron llevarlo a los escenarios en 2009. Es un texto de un único acto que la compañía ha decidido articular en una serie de episodios. En él,
Angélica Liddell clama contra el hambre como si fuera un genocidio consentido por el sistema capitalista, critica a la burguesía y su hipocresía, habla de los privilegios, el odio, las desigualdades y el sufrimiento. Es un monólogo mordaz y furioso, escrito con ira y con dolor, concebido -en palabras de la propia autora- como un insulto ininterrumpido. En él, se realiza un análisis sociopolítico de la cultura, la integridad, la riqueza, la pobreza, el lujo y la miseria, todo ello con la comida como telón de fondo. En el texto se alternan constantemente textos en discurso directo (en el que la protagonista se dirige a un interlocutor invisible), fragmentos de aspecto autobiográfico y momentos de gran concentración conceptual, que utilizan un lenguaje cercano al ensayo o al discurso. Para muestra, un botón: ¿De qué sirve la idea de arte como Estado? Lo importante es la distracción. Hay que cubrir la franja horaria previa a la cena, es decir, previa a la hora de atiborrarse y de olvidarse de la salud. El espectador está en su derecho, harto de trabajar de lunes a viernes. Esto es normal. La puesta en escena logra ser austera a la vez que seductora. Hay momentos de un enorme atractivo visual, cuadros plásticos muy poéticos. La escenografía no sólo complementa el texto, sino que lo eleva a otro nivel. Partiendo de un monólogo desnudo sin ninguna acotación, la compañía ha hecho un trabajo excelente de creación escénica. El resultado es un discurso visual tan rico y complejo como el literario. En resumen, un texto directo, intenso, rico, sin concesiones, donde no sobra ni una palabra. Altamente recomendable. Si vais este fin de semana, debéis saber que el domingo la compañía organiza un encuentro con el público post-función. Avisados estáis.
Todas las fotografías son ©Daffke Hollstein 2015
Fue el pasado domingo y me pareció un trabajo magnífico. Mi enhorabuena a la actrices y al director. MUUUUUCHA MIERDA para esta segunda semana.
[…] con una puesta en escena exclusiva del espectáculo Mi relación con la comida (que Culturaca ya cubrió en su momento). La compañía Almaradas volvió a ofrecer un tour de force escénico sobre el texto de Angélica […]