Caïm Riba, a 306 km. mar adentro
a 306 km es el primer disco en solitario de Caïm Riba. Seguro que muchos lo conoceréis por ser miembro de Pastora. Tras casi veinte años de carrera, Riba ha decidido lanzarse a volar solo y lo hace con un disco delicado, delicioso, íntimo y hecho con mucho mimo. Un viaje de Barcelona a Formentera y viceversa que Riba nos canta a ritmo tranquilo que se mece como las olas del mar en calma.
Llevas muchos años con Pastora, y ahora te lanzas con tu primer disco en solitario, ¿qué te ha llevado a dar este salto? No ha sido premeditado. Ya hace tiempo que me rondaba la idea de editar un disco con canciones más introspectivas. Algunas de mis composiciones sufrían una fuerte transformación para adaptarse al formato de Pastora, y de ahí que me vino la idea de empezar a reservarlas para editarlas más adelante y así mantener mejor su esencia. Cuando me decidí a tirar adelante el proyecto tenía en mente un disco instrumental, pero poco
a poco me fui animando a cantar y componer letras, hasta que tuve una paridad entre instrumentales y cantadas. ¿Hay timidez a la hora de ejercer de frontman ahora que te lanzas en solitario? Al principio un poco de vértigo y la timidez que traigo ya de serie, pero ya voy cogiéndole el punto y cada vez se me hace más natural. a 306 km, es la distancia entre Formentera, tu lugar de nacimiento y Barcelona, lugar donde resides y el nombre de tu disco. ¿por qué este título? Me di cuenta que a menudo al escribir las letras hacia una retrospección a mi infancia y sobretodo a mi adolescencia veraniega, que por lo general pasaba en Formentera. Un día quise calcular la distancia que había desde mi estudio hasta el lugar donde había nacido. Según Google Maps son estos 306 km. ¿Qué ha supuesto realizar todo ese viaje emocional para la creación del álbum entre estas dos ciudades? Creo que es un viaje que forma parte de mi, es un viaje que recorro a menudo. Para mi el recuerdo es un poco bucólico y melancólico a la vez, pero me da la sensación que es lo que suele pasar… son momentos que no se pueden repetir. ¿Cómo surgen las colaboraciones con Santi Balmes y Jordi Lanuza? Cuando el proyecto era puramente instrumental, creí que seria una buena idea contar con alguna colaboración vocal para darle un toque al disco. Sucedió que para quitarles presión me puse a pensar en ideas y letras para que las cantasen… De hecho, fue así como me fui animando a cantar yo mismo. ¿En qué te has inspirado para escribir las letras de este disco a parte de en Formentera y Barcelona? En mis relaciones sentimentales, en el recuerdo de mi madre, en sentimientos de euforia, tristeza, esperanza,… Creo que hay canciones incluso de cuando tenías 17 años, dedicadas a tu bisabuela y otra a tu madre como “Volarà” o “Omplint la neu”. ¿Son importantes las mujeres de tu vida? Si, ya era consciente, pero presentando el disco en directo me he dado aún más cuenta de lo importantes que son en mi vida.
¿Cómo de diferente es componer para un disco en solitario que con Pastora? ¿Cambia mucho el proceso o es el mismo? Es parecido, aunque cambia un poco. Trabajar en solitario a veces se hace más arduo, pero tienes la libertad de hacer lo que quieras y darle las vueltas que quieras. Por otro lado, te falta el factor sorpresa de trabajar en equipo y que surjan cosas que no tenías pensado. ¿Cómo ha sido el proceso de creación del disco? Tengo entendido que muy artesanal. ¿ha sido muy diferente de otras experiencias tuyas en estudio? Con Pastora hemos hecho los discos de varias maneras, pero en muchos aspectos acabábamos trabajando de la misma manera en casa que en un estudio, por lo que en general tendíamos a reservar para el estudio sólo las grabaciones complicadas, como la batería. Por otro lado, la crisis cada vez nos lo pone más difícil, y aunque siempre es bueno poder cambiar de aires y concentrarte en el proyecto, la verdad es que el último disco de Pastora ya lo trabajé en casa principalmente. El disco lo fui cocinando sin prisas en casa, y cuando ya lo tenia bastante avanzado, me puse con las colaboraciones. Ferruti que ya colaboraba en Pastora, se encargo de regrabar los bajos del disco, y para las baterías conté con la colaboración de Jorge García, que lo conocí en un concierto de Marcel Cranc y me gustó mucho como tocaba. Para la grabación de baterías y el mastering del disco, me fui a Mallorca, a Calma Estudis, que es el estudio de confianza de Jorge. Cuéntanos un poco sobre el diseño del disco que es muy cuidado. Una vez tenía el título del disco, revisando fotografías me encontré con una mía caminando de niño en Formentera. Me pareció una bonita metáfora del camino recorrido desde entonces. El diseño gira en torno a esta foto. Para el libreto me inspiré en un viejo diario de mi madre, en el que además de escribir, iba haciendo dibujitos. Se me ocurrió que en esta ocasión los dibujos los podían hacer mis hijos. Tocas en directo junto con Ferruti, al bajo, y Narcís Coromines, teclados y batería, ¿Por qué ellos dos como tu banda? ¿Y qué nos van a deparar los conciertos? Ferruti y Narcís ya tocaban en Pastora, así que fue fácil. Para la batería nos acompaña Salva Toscano y estamos encantados, ¡es un músico genial! Jorge García también, pero vive en Madrid, y tal como está el patio me pareció que debía buscar a alguien que no tuviese que desplazarse cada vez. Supongo que todo el mundo te lo habrá preguntado, ¿cuál es el futuro de Pastora? Sinceramente no lo sé. No teníamos tampoco pensado parar, esto para mi era un proyecto paralelo, pero imagino que necesitábamos un poco de aire después de tantos años, y al acabar la gira de Una Altra Galàxia la cosa se ha ido enfriando a la espera de retomar la actividad cuando nos vengan las ganas. ¿Y cuál es el futuro de Caïm Riba para este 2015? ¿Habrá más discos en solitario? ¿Estás preparando material nuevo? Para este 2015 la idea es ir afianzando el proyecto e ir trabajando nuevas canciones para un segundo disco. Siempre que puedo voy trabajando ideas y ya tengo algunas cosas, pero aún me falta mucho. Últimamente hemos estado muy liados en casa con el nacimiento de Savina.