In-Edit 2016: Iggy danos peligro
Otro año más y otra edición del Festival Beefeater In-Edit de documentales musicales. Uno de los festivales de cine con más público de la ciudad, en el que año tras año, nos ofrecen la oportunidad de ver los mejores documentales que se realizan en torno a la música. Una edición plagada de historias de grandes músicos y bandas, pero también de grandes descubrimientos, de historias pequeñas que se hacen grandes en la pantalla del cine. Aquí va un repaso de lo que hemos visto en estos días.
Gimme Danger
Uno de los documentales más esperados del In-Edit Festival, Gimme Danger es la rendición visual que el gran Jim Jarmush le ha dedicado a la mejor banda de rock and roll de todos los tiempos, según sus propias palabras, The Stooges. No lo vamos a negar, ¡vivan los Stooges! Esta película es un homenaje, un canto de amor a una de sus bandas favoritas, en el que Iggy Pop se convierte en protagonista y voz casi absoluta de una historia que peligro nos da bien poco. Hubiera esperado de Jarmush algo más, ese click que nos da en sus películas, que nos atrapa y no nos suelta. Esa emoción que nos transmite y ese toque tan suyo que hace de sus obras algo único. Lamentablemente, Gimme Danger no tiene nada de eso. Podría ser un documental de Jarmush o de cualquier otra persona. Supongo que es el precio de tener total acceso a mr. Pop. Al que adoramos desde el segundo cero que aparece en pantalla, cierto. Porque es Iggy y es muy grande, pero falta algo, falta el peligro, ese que tanto lo ha caracterizado. Falta la chica, la enjundia, falta la sin razón, la furia y la rabia. Y eso en un documental sobre los Stooges no puede faltar, nunca. Seguramente sino tienes ni idea de la historia de la banda puede que te convenza, para neófitos bien, pero para los que hemos buceado en la música de los Stooges desde hace tiempo, no nos basta. We want more mr. Jarmush!
A Poem is a Naked Person
Una invitación a descubrir el mundo de Leon Russell. Sus amigos, sus compañeros artistas, la gente que le rodea y que se pasea por los alrededores de su estudio en Oklahoma. Íntimo y realista retrato del día a día de uno de los grandes músicos de los 70 y de la historia de la música. Momentos íntimos y relajados, realidad cotidiana y actuaciones espectaculares que se mezclan para darnos un retrato del artista a través de él mismo y su entorno más cercano. Un documental que no se estrenó en su momento y que se ha convertido en casi de culto, por fin estrenado en nuestras pantallas, gracias al In-Edit Festival. Ruda belleza visual, momentos mágicos e hipnóticos, la voz de Russell y su presencia cautivadora. Este documental es puro Leon Russell incluso cuando no está en pantalla. Una joya que por fin podemos disfrutar en la gran pantalla. Producido por el mismo artista, nos invita a introducirnos en su música y su mundo y nosotros nos dejamos seducir por su mirada clara y su impresionante música. Como bien dice el título, un poema es una persona desnuda y en este documental Russell se nos muestra poéticamente desnudo.
Breaking a Monster
Entretenido relato del afán de tres niños afroamericanos de Brooklyn en octavo grado que deciden que el heavy metal es a lo que quieren dedicarse. En Breaking a Monster se nos cuenta la historia de la banda Unlocking The Truth. Nos colamos en sus vidas mientras un veterano agente les consigue el contrato discográfico del año y se ven inmersos en la vorágine de la fama. Como un invitado silencioso, nos colamos en su vida y seguimos sus aventuras, sorprendiéndonos de la naturalidad y la marcada determinación de tres jóvenes a los que lo único que les importa es la música. Una visión realista de como los músicos adolescentes viven el proceso de inmersión en la industria musical y como sobreviven a ello. Divertida, sincera y entretenida. La versión teen del Some Kind of Monster de Metallica, de un grupo que aún está forjando su futuro, sin los egos bañándolo todo, eso sí.
Gary Numan: Android in La La Land
Quien espere un documental sobre la trayectoria musical del genio de la electrónica se ha equivocado de sala. Gary Numan: Android in La La Land es el relato de la gestación de la última obra musical de Numan, Splinter. Tras siete años de desgracias personales, miedos, ataques de ansiedad y caídas en picado, el músico se muda a vivir a Estados Unidos y vuelve a encerrarse en su estudio casero para grabar. Sentido, directo y cándido relato en primera persona de un hombre esquivo y con síndrome de Asperger que decide abrirse en canal delante de la cámara para contar sus miedos y terrores más íntimos. Esos que le han hecho gestar las canciones que lo hicieron famoso. Más como un relato familiar y personal que musical en sí mismo, el documental a veces parece más un vídeo de promoción del disco que otra cosa. Merece la pena, sin embargo, los momentos en los que el artista se sincera y habla a la cámara sin tapujos.
A Song For You: The Austin City Limits Story
Hay programas musicales y luego está Austin City Limits. El programa que más años lleva emitiéndose en la televisión pública americana sobre música. Un referente y un clásico absoluto de la buena música que se hace en el país de las barras y las estrellas. Un documental sobre su historia supone un deleite para cualquier persona que le guste la música, pero lo cierto es que este A Song For You: The Austin City Limits Story no deja de ser un relato más bien clásico y tirando a aburrido. Es una lástima, ya que el material musical es tan suculento. Pensar en el archivo del mismo emociona a cualquiera que ame la música ni que sea un poquito. Por allí pasaron lo mejor y siguen haciéndolo. Gracias a ellos hemos visto actuaciones completas de músicos que nunca han pisado nuestras tierras. La lista es interminable. Pero esto no es suficiente para enganchar.
A este documental le falta un personaje que enganche, una personalidad arrolladora, algo que no tiene. Una lástima. Pero lo cierto es que cumple un objetivo, al menos en nuestro país, el darnos cuenta de la triste y paupérrima programación musical que tenemos aquí y la poca importancia que se le da a la música en la televisión pública. Eso sí, los toros y el fútbol que no falten, ¿eh? Una vergüenza.