Warhaus, el discreto encanto de los belgas
En nuestro paso por el reciente Vida Festival, la mayor sorpresa que nos llevamos fue descubrir a los belgas Warhaus. Esta formación, que básicamente es el proyecto en solitario de Maarten Devoldere (miembro de la banda indie Balthazar), dio uno de los conciertos más delicados y a la vez intensos de todo el festival.
Como para no enamorarse de ellos.
Maarten Devoldere es un tipo elegante con una voz seductora. Imagina un cruce entre Serge Gainsbourg y Leonard Cohen, pero bien peinado y aseado. Y entonces imagina que es de noche y llegas a un bar de luces rojas y ambiente acogedor de una ciudad europea que todavía no existe. Entras, te sientas en la barra y se te acerca un tipo rubio y parsimonioso. Te mira con ojos de seductor abatido y te canta al oído:
Such a child, such a queen.
You don’t play in between.
Disarray in your eyes.
Put your spell so precise.
Y empiezan a sonar pianos efímeros y trompetas fantasmagóricas que parecen salidas de un sueño de David Lynch.
La banda tiene un único disco, We fucked a flame into being, título sugerente sacado de la novela Lady Chatterley’s Lover de D.H. Lawrence, que vendría a significar algo así como “Follando, dimos vida a una llama”.
En directo, Maarten Devoldere y su compañera Sylvie Kreusch despliegan todo su encanto y su sensualidad con una sencillez insultante. La base musical es muy minimalista, con una batería, un guitarrista acompañante, algunas líneas de bajo o frases de saxo del propio Devoldere y los coros y bailes seductores de Kreusch.
El conjunto es sólido y ejemplifica a la perfección el concepto de menos es más.
Por un momento, me vi trasladado a esa escena gloriosa de El cielo sobre Berlín en la que uno de los ángeles entra en un club nocturno y se encuentra una actuación hipnótica de Nick Cave.
Salvando las distancias, claro, porque Maarten Devoldere no se puede ni comparar con la grandeza de Nick Cave. Pero creo que pretende jugar a ese juego, y esa ambición promete.
Una banda a tener muy en cuenta, y que espero que nos den grandes alegrías en el futuro.
[…] el Vida Festival, quedamos encantados con ellos (podéis saber hasta qué punto leyendo esto). Con un único álbum bajo el brazo, la banda nos ofreció un concierto completo que […]