Cysko Muñoz, uno sólo escribe como se desnuda
Cysko Muñoz es un lector empedernido de poesía. Lee sin parar, ya sea sentado tranquilamente en un café o en la pantalla de su móvil. Pero, sobre todo, Cysko Muñoz es Poeta. Así, en mayúsculas. Sale a la calle y es poeta. Toma un café y es poeta. Sube al monte a buscar espárragos y es poeta. No puede evitarlo. Además de recitar en todos los locales conocidos de Barcelona, es el creador de la jam Periferic Poetry de Sant Boi y tiene la tendencia a colaborar con todo tipo de artistas, como músicos o fotógrafos. Hace ya un tiempo empezó una iniciativa llamada Versos de pizarra, que consiste en escribir versos en tiza y fotografiarlos en los rincones más bellos y curiosos que encuentra. Otro proyecto muy especial de Cysko Muñoz es La Maldita Música y la Puta Poesía, donde colabora con la pianista Silvia Rodríguez. Como no podría ser de otra forma, Cysko se ha sometido a nuestra entrevistaca: ¿Por qué poesía? Porqué me permite decir todo aquello que de otra forma callo. Porqué es el bálsamo que, frente al tránsito y a la vida, me permite ubicarme, saber dónde estoy pero también donde quiero estar. En definitiva, es la mejor forma que he encontrado de reflexionar sobre lo que me ocurre. Es la más efectiva para mí. En muchas ocasiones la sensación que me produce escribir un poema es la de librarme de un lastre de aturdimiento o de una venda que me impide ver con claridad. La sensación es liberadora. ¿Hacia dónde va tu poesía? Ni idea. Mi poesía va conmigo y tampoco se hacia dónde voy yo. Mis poemas siempre hablan de lo que me ocurre, de lo que siento, de lo que vivo así que mi poesía supongo que me acompañará en ese viaje si es que no nos volvemos a separar (ya lo hicimos una vez). ¿Hacia dónde va mi poética? Ni idea tampoco. Creo que esas cosas es mejor no preguntárselas. Creo más en “hacer” que en “pensar”. Claro, así me va. ¿Qué poetas te han influenciado más? La verdad es que no sé por dónde empezar a responder a esta pregunta… Depende de la época, ¿no? En un inicio, cuando me acerqué a la poesía, Lorca y Machado eran mis autores de referencia. Posteriormente, el estilo cortante de Blas de Otero o de Ruiz de Amezcua creo que influyó claramente en algunos textos. En los últimos tiempos descubro en mis textos ciertos restos de autores contemporáneos como Karmelo Iribarren. Creo que soy bastante poroso a lo que leo y aunque me gustaría creer que en mis poemas se adivina una voz propia, no negaré que aquello que me entusiasma me marca y me influye. Creo que negarlo es un ejercicio absurdo. ¿Cuál es tu poeta actual preferido y por qué? Batania (Neorrabioso). Sin ninguna duda. Me parece una voz única que, por encima de otras cuestiones que le rodean, lo erigen como un poeta sobre el que se va a escribir mucho. Adoro también la poesía sencilla pero llena de pasión de Ana Pérez Cañamares y la simplicidad y el aura de los poemas Karmelo Iribarren. Pero si me hubieses preguntado hace diez años o de aquí a veinte seguramente te diría otros. A continuación puedes ver un vídeo de Cysko Muñoz con Toni Jimenez a la guitarra. Para terminar, podrás leer cinco de sus poemas (Tan valiente no, De letras, Las manos de mi padre, Yo solo se escribir y En este bar). Sólo te faltará verlo en directo. Muy recomendable. Tan valiente no A los 36 uno ya sólo escribe como se desnuda sin ningún miedo a mostrarse (Pero esperando que las arrugas el pelo y los lunares sólo sean accesorios del poema) De letras No soy capaz de calcular cuantos años ya sin el amor. Ni siquiera el sexo es cuantificable últimamente. Ya me lo avisaba mi padre: Chaval, no te va a servir de una puta mierda eso de ser poeta. Las manos de mi padre Las manos de mi padre están hechas de tierra seca y agua de acequia. De puño de azada y manojo de esparto de un millón de surcos de barro secándose al sol. Las manos de mi padre nacieron viejas cultivadas entre fanegas de injusticia y de miseria, pero siempre supieron plantarle cara a las lágrimas con un golpe en la mesa. Las manos de mi padre no tienen destino en las líneas, nunca existió el futuro para quien lo ha de pelear cada día… Y aún así las manos de mi padre siempre huelen a tomillo en el monte y a frío en el alba y siempre tienen trigo en las palmas y siempre bailan con un fandango de voz antigua y quebrada. Por eso no entiendo que hoy, en la comodidad distraída de esta gran ciudad, cuando la tierra hace tiempo que yace olvidada – pero sus dedos aun son ramas de olivo -, que hoy, haya reconocido de repente sus manos en el contorno de mis nudillos. Las manos de mi padre están en mi. Yo solo se escribir Me paso el día buscando versos y las palabras se ríen de mi formando filas de dientes exactas y literales. Recorro bares buscando versos, mordiendo siempre la misma página del diccionario, la misma esquina del laberinto, el mismo fondo del mismo vaso. Acabo exhausto buscando versos… y agotado me descubro espiando a otros poetas, envidiando sus bolsillos registrando avergonzado sus carteras. Y entonces me doy cuenta de que yo no puedo escribir como ellos, De que yo no puedo escribir como Nadie. Que yo solo se escribir si soy yo quien se asoma y se incendia en el borde del poema.
Que yo sólo se escribir reventándome a patadas conduciendo con los dientes a un chupito por farola. Que yo solo se escribir maldiciendo a mil gargantas escupiendo desde un puente destripando versos llenos, de sangre y de semen. Y entonces las palabras ya no se ríen. En este bar En este bar, o en uno como éste, llevo años acumulando sed. Y le pido al camarero la cuenta de las horas. Y pago en efectivo. Y me tomo otra. (La poesía no es para bebérsela) En este bar, o en uno como éste, se me incendian los pantalones cuando entras por la puerta. Y quemo todos mis versos. Y todo suena soez. (La poesía no es para follársela) Y se me derrama la voz debajo del taburete y se me pone negra. Y alzo el tono. Y corro el riesgo de hacerme escuchar. (La poesía no es para gritarla) En un bar como éste, o en éste mismo bar, la verdad es que no lo recuerdo bien, se me han escurrido los años como monedas de mi bolsillo roto. Y aun así… la poesía es.
[…] empezó con el primer Perifèric Poetry Sant Boi, idea del poeta Cysko Muñoz. El 30 de mayo de 2013, se organizó el primer Periferic Poetry en La Masia de Sant Boi. Los […]