Art Madrid, JustMAD, Hybrid, Madoz, Baumgarten y otras delicias de la capital

Mi reciente visita a Madrid dio para mucho. En cuatro días, aparte de visitar la feria ARCO, pude ver mucho arte en poco tiempo. Durante la semana de ARCO, la ciudad ofrece un sinfín de propuestas artísticas, a cual más interesante, y dan ganas de tener el don de la ubicuidad para estar en todas partes a la vez. Pero, a pesar de que me perdí alguna cosa interesante (como el festival Urvanity, del que solo pude ver la fiesta inaugural), pude sacarle bastante partido a esos días.
Art Madrid.
Del 22 al 26 de febrero (las mismas fechas que ARCO), la Galería de Cristal del CentroCentro acogía la 12ª edición de la feria de arte contemporáneo Art Madrid.
Art Madrid es como una versión en miniatura de ARCO. Si en la feria de Ifema hay 200 galerías, aquí encontramos 43 (que no obstante presentan la obra de más de 300 artistas). La mayoría de las galerías eran peninsulares, con algunas invitadas interesantes del resto del mundo.
A pesar de lo relativamente reducido de las dimensiones, había una gran concentración de arte de calidad. Aquí pude descubrir la obra de artistas como Cristina Mur, cuyas obras coloristas y luminosas me recordaron un poco a Cy Twombly, las atmosféricas ilustraciones de Gustavo Díaz Sosa o el minimalismo abstracto de Rubén Martín de Lucas.
A destacar también la acción realizada por el artista Misterpiro, que desde el stand de ginebra Hendrick’s se dedicó a pintar en directo pepinos y regalarlos a los asistentes. Mi único souvenir de la feria.
JustMAD
El off de ARCO y Art Madrid se llama JustMAD, que este año presentaba su octava edición. El Colegio de Arquitectos acoge esta pequeña pero interesantísima feria de arte, dedicada principalmente a galerías y espacios artísticos emergentes, tanto nacionales como internacionales.
En JustMAD contaba con la participación de 28 expositores, donde estaban representados 14 países. El nivel de las obras representadas era muy alto. Destacaría las propuestas performáticas de La Juan Gallery (con artistas como Miss Beige o Eloy Cruz), las fotografías surrealistas de Jennifer B. Thoreson o la divertida Máquina de callar de Arturo Moya Villén.
A diferencia de sus dos hermanas mayores, en JustMAD está representado el arte multimedia y la performance, y esto dice mucho acerca del atrevimiento de esta convocatoria.
Hybrid
Podría decirse que el Hybrid Art Fair & festival es el off off de los festivales artísticos de Madrid. El Hybrid se celebra dentro del hotel Petit Palace Santa Bárbara, en la línea de otros festivales en hoteles como el LOOP Barcelona.
En este caso se podían ver habitaciones dedicadas a galerías y otras en las que estaban representados colectivos de creadores. Hybrid se decanta bastante por la fotografía, el el pop art y el arte urbano. El sábado 25 se celebró el ciclo de performances Acciones Hybridas, comisariado por Mario Gutiérrez Cru, que tenía buena pinta pero desgraciadamente no tuve tiempo de ir.
A pesar de que me interesó como propuesta, el nivel del Hybrid no me pareció tan espectacular como el de JustMAD. No obstante, estamos hablando de su primera edición, y en cualquier caso apunta maneras.
Chema Madoz, El viajero inmóvil
Por si no tuviéramos nada más que hacer, mi compañera de viaje y yo decidimos ir a ver también la exposición de Chema Madoz en el Centro Cultural Conde Duque.
Yo conocía a Madoz solo de reputación, pero nunca había visto su obra en directo. Y debo decir que hacía tiempo que no me impresionaba tanto un descubrimiento.
Las 34 fotografías inéditas que componen esta exposición del artista madrileño son, en pocas palabras, maravilla pura. El poder de evocación de sus montajes fotográficos es enorme.
Madoz recibió de la Fundación María Cristina Masaveu el encargo de dar su visión sobre Asturias. Y, tal y como explica el propio artista, no tuvo la necesidad de desplazarse al lugar concreto para realizar las fotografías, sino que las hizo todas en su estudio, nutriéndose de sus ideas sobre Asturias. De ahí la idea del viajero inmóvil.
Se trata de una colección de fotografías que invitan a viajar por la imaginación, explorando varios elementos característicos que evocan de un modo u otro la idea de Asturias. Son obras elegantes, ricas, potentes, que acaban convirtiéndose en verdaderos poemas visuales con un gran poder de evocación.
La exposición estará ahí hasta el 16 de abril. No os la perdáis.
Lothar Baumgarten, El barco se hunde, el hielo se resquebraja
Para terminar, otro de los grandes momentos de esos cuatro días de arte en Madrid fue la visita a esta obra etérea en el Palacio de Cristal del Parque del Retiro (que podrá visitarse hasta el 16 de abril).
Lothar Baumgarten es un artista conceptual alemán que ha trabajado mucho con esculturas efímeras y obras creadas ad hoc para el lugar de exposición.
En este caso, la obra creada para el Palacio de Cristal es de una gran sutileza. Entre 2001 y 2005, Baumgarten se dedicó a grabar en audio el deshielo a orillas del río Hudson (estado de Nueva York). Tras un cuidadoso montaje, el artista reproduce en bucle esos sonidos en el interior de este edificio del Retiro. Prestando atención, el visitante puede tener la impresión de que lo que se está resquebrajando es el techo del propio Palacio de Cristal. Delicado, inquietante y poético.
Si no tenéis tiempo o posibilidad de visitarlo en persona, podéis conformaros con este vídeo. No es tan potente como la experiencia real, pero menos da una piedra.