Mujeres: “Por primera vez nos hemos puesto de acuerdo en qué contar con este nuevo trabajo”
“Yo quiero montar una banda de rock and roll”. ¿Cuántos actores encarnando el papel de músico frustrado no se lo habrán preguntado? ¿Cuántos personajes en novelas autobiográficas? ¿Cuántas personas en la vida real? Muchas, pero Mujeres no sólo se lo planteó. Aquella idea alimentada por la ilusión de cuatro estudiantes de cine se ha traducido en giras por media Europa y parte de los Estados Unidos; una demo, cuatro epés y dos largos. Algo “impensable” hace ochos años cuando tocaban en shorts minúsculos para un Heliogàbal, para su sorpresa, lleno hasta la bandera.
Entrevistamos a Yago Alcover, guitarrista, vocalista y compositor de la banda de rock, con motivo del Festival Cara B, que se celebrará este sábado a las 18.00 horas Fabra i Coats – Fábrica de Creació de Barcelona.
¿Cómo pasáis de estudiar Cine en la ESCAC (Escola de Cinema & Audiovisuals de Catalunya) a dar un bolo en un Austin (Texas)?
La verdad es que eso no te lo sé contestar. Nos conocimos rodando cine. Martín nos dejó hace algo más de un año para seguir haciendo cosas porque esto es super absorbente. Lo que te puedo decir es que teníamos muchas ganas de hacer cosas juntos. Nos gustaba bastante la música y, de hecho, todos estamos ligados a ella de una forma u otra desde la adolescencia. Así que montamos un grupo como lo puede montar cualquier otro.
Han pasado seis años desde entonces. ¿La finalidad con la que nació Mujeres ha cambiado en todo ese tiempo?
Hemos aprendido muchas cosas. La verdad es que cuando empezamos no teníamos ni idea de nada, tanto musical como profesionalmente hablando. No sabíamos lo que era un manager, ni para qué servía. Tampoco teníamos idea de cómo nos teníamos que mover para que las cosas funcionasen. Respondiendo a tu pregunta, no, no ha cambiado la finalidad, pero la banda ha madurado a nivel musical y de gestión. Sinceramente, si me llegan a decir hace seis años que iba a estar aquí no me lo hubiera creído. Tampoco es que me lo planteara.
¿Qué consejo les das a las bandas que acaban de pisar por primera vez un ensayo?
Lo principal, independiente de dónde sean, es creer en lo que se hace y hacerlo de verdad. Estoy convencido de que en el mundo de la música independiente es muy difícil engañar a nadie. Si la cosa está funcionando es porque la gente cree en ello. De hecho, a las bandas independientes no les hace ningún bien meterse en una macro campaña de propaganda. Lo digo porque este hecho se percibe recientemente en algunos conjuntos que acaban de salir. Conjuntos con una exposición a nivel de medios y promoción super bestia. Aún así, la gente no termina de creer en ellos y se crea cierta desconfianza. Otra cosa es que su música tenga sentido en el contexto que se vive. Hay tendencias musicales y hay proyectos que pueden tener una realidad mayor en un momento u otro. No me refiero que tengas que ser oportunista, pero si te quieres dedicar a esto tienes que darte cuenta de qué música tiene sentido en un momento u otro. Por ejemplo, ¿es casualidad que en Barcelona esté funcionando de golpe la música electrónica? Bueno, podemos hablar de la historia de la música electrónica en la ciudad o también podemos hablar de que en los últimos años ha crecido el número de productores de música house. Hay mucha peña haciendo house que antes se dedicaba a hacer otra cosa.
¿Aceptaríais una oferta suculenta por parte de una multinacional como Warner?
Ninguno de los cuatro somos muy amigos del modus operandi de estas empresas. Si la pregunta es si me he planteado vivir de esto, la verdad es que es bastante agotador. Cuando disfrutas tanto con una cosa es complicado decidir si se va a convertir en lo que te dé de comer.
¿Podríais ganaros la vida con vuestro proyecto en un futuro?
Para vivir de esto hay que hacer, como todo en la vida cuando se convierte en profesión, varios sacrificios y no sé si estoy dispuesto a ello. Lo que si tengo muy claro es que la música es el espacio en el que me siento completamente libre y que a mayores metas, mayores gastos.
En vuestro caso en cuestión de seis años habéis tocado por media Europa y parte de los Estados Unidos, que no es moco de pavo. ¿Cómo funciona en los distintos países la escena? ¿Cuál os ha llamado más la atención?
En Bélgica, un país que no ha sufrido las consecuencias de una dictadura como la nuestra, es muy distinto. Un ejemplo muy claro está en los centros juveniles. El Gobierno los apoya y hay mucha gente allí que goza de un presupuesto público, por lo que no tiene problemas con ordenanzas civiles como en España. Ordenanzas que dan muchos problemas. Ellos tienen numerosos espacios a su disposición donde acogen a grupos europeos o de la escena local. Alucinas. Esto sólo lo he visto en Galicia. En Barcelona, por ejemplo, es imposible montar un concierto si no es en una sala o lo tienes todo muy bien atado. La cultura de conciertos creada en este país se basa en la búsqueda de un promotor que trabaja para una red de salas donde viven de las copas. La idea de que se pueda organizar un concierto en cualquier sitio y en cualquier momento queda desterrada a la más absoluta indiferencia. Excepto en las casas ocupas. Así es que o te mueves en el escaso margen de la ilegalidad o prepárate para apoquinar. ¿Cómo se puede competir con la Razzmatazz? ¡Es imposible!
¿Cómo se puede “luchar” contra eso?
Si fuese más fácil vivir en el mundo de las asociaciones, de pequeños círculos que impulsasen los conciertos. Es que está demostrado… Para mí es un problema eminentemente cultural. Aquí nadie ha dicho que las asociaciones tengan que ser de un tipo o de otro. Si las asociaciones no son lo suficientemente abiertas, bienvenido sea el problema. Porque la solución es relativamente sencilla. Del mismo modo que también parece una locura a veces que los conciertos se tengan que montar con dos grupos parecidos. ¡Tú puedes mezclar lo que quieras! El problema de base está en que no se pueden crear asociaciones porque no hay espacios. Si los hay, los alquileres son abusivos. Y cuando tienes el dinero suficiente para montar un bolo, te lo chapan por un problema de volumen o de cualquier otra cosa. A eso añádele que el estado no hace ningún tipo de contribución. La gente tiene muchas ganas de que pasen cosas, pero así es imposible.
¿Esto qué piensas, lo piensas porque estás tocando en Mujeres, no?
Sí, supongo que por eso trabajamos en la realidad que trabajamos, sacamos los discos cuando más o menos nos apetece y así vamos. Creo mucho en esta escala reducida de las cosas. Toda la historia de viajar ha sido por currar y tener ganas. Muchas ganas. Eso sí, ha sido una matada.
La semana pasada estabais mezclando lo que será vuestro tercer elepé. ¿Se va a ver éste influido por la impronta de Univers y Jessica & The Fletchers?
Las cosas que nos pasan en los otros grupos a los que pertenecemos inevitablemente influyen… La verdad es que es la primera pregunta que me hacen del disco nuevo. Así que tampoco voy a largar mucho. El disco se ha mezclado ya y estamos esperando al mastering. Ahora estamos negociando para que el disco se lance en otro país, además de España y Bélgica. En cuanto al sonido se percibe un cambio en el disco, pero no deja de ser lo que veníamos haciendo: rock.
¿Con algo de pop?
No sé… Creo que tiene el mismo pop que tenía hasta ahora. En cuanto al sonido, el disco es muchísimo más unitario que cualquier otro que hayamos sacado. De hecho, es el primer álbum que hemos grabado por pistas y está todo más ordenado. También es un poco más moderno, no tan clásico. Aunque es imposible que no sea clásico, porque somos lo que somos. Hay miradas a otros lugares. Contiene influencias de los 70, cosas más punk 77’, pero punk del 77’ no garage punk. De hecho, el garage desaparece prácticamente. Aunque en el segundo disco éste ya había dejado de estar tan presente. Es un disco más power pop que garage.
¿Habrá más baladas del estilo “I’m over with you” en el nuevo largo?
Hay alguna canción un poco lenta, eh. En cuanto a la estructura del largo es muy parecida a la de los otros elepés. Hay una primera parte del disco muy potente que va a toda leche, otra segunda que es más clásica, y una tercera que tiene la cosa rara esta que te apetece hacer siempre con un tempo más lento… Después de ocho años con esto te tienes que reinventar un poco.
¿Qué puedes decir de vuestras letras de este último disco?
Por primera vez nos hemos puesto de acuerdo en qué queremos contar con un disco, que es algo que no nos habíamos planteado mucho. Nos apetecía contar una historia con él y hablar de la gira americana, el cambio de discográfica… Reflejar un sentimiento de superación, pese a lo que pueda acontecer. Con el tiempo hemos tenido que defender en reiteradas ocasiones que esto que estaba pasando era de verdad.
Reinvención por dentro y por fuera. ¿En cuanto a la producción de vuestros videoclips también?
Sí, somos gente que venimos del vídeo. Yo me dedico a dar clase. Paul estuvo trabajando como guionista. Compartimos la afición por el cine. Martín a partir del segundo disco estuvo haciendo vídeos sobre la banda. El segundo videoclip, de hecho, lo hizo él. De cara al tercero queremos darle todavía más importancia a la producción y cuidar más los asuntos de promoción, que siempre hemos sido un desastre.
¿Tocaréis alguna canción de vuestro próximo cedé en el Festival Cara B el próximo sábado?
Sí, alguna tocaremos porque hay que rodarlas, el adelanto es la semana que viene y la salida del disco digital la última semana de marzo.
[…] porque son lo más bonito que hay en este mundo“). No sólo porque los entrevistáramos en Culturaca. No sólo porque se describen así: “Somos 4 tipos con instrumentos. Hacemos música vieja […]
[…] nuestros Facebooks, inspeccionando todo lo que llevábamos en la parte de atrás del coche. A Mujeres también los pararon. Fue un […]