Puñales por la espalda, o nunca la muerte fue tan divertida
Cuando el renombrado novelista de misterio Harlan Thrombey (Christopher Plummer) es encontrado muerto en su mansión, justo después de la celebración familiar de su 85 cumpleaños, el inquisitivo y cortés detective Benoit Blanc (Daniel Craig) es misteriosamente reclutado para investigar el asunto. Se moverá entre una red de pistas falsas y mentiras interesadas para tratar de descubrir la verdad tras la muerte del escritor.
Esta es la premisa inicial de Puñales por la espalda (Knives Out; 2019), la última película del director Rian Johnson está llena de rostros famosos y le rinde tributo a la gran Agatha Christie con una película que combina misterio, suspense y entretenimiento, con unos ingredientes infalibles: un detective, un cadáver en el sofá y media docena de sospechosos.
Knives Out es esencialmente una versión dinámica del típico caso de asesinato al estilo Agatha Christie, con interrogatorios, intereses cruzados, traiciones, posibles motivos y coartadas dudosas.

La trama es un divertido juego del gato y ratón. Y como no podía ser de otro modo, el escenario es una mansión señorial con rincones oscuros, escaleras crujientes y un laberinto de habitaciones digna de un tablero de Cluedo.
Los que nos criamos con obras maestras del humor de aire detectivesco como Un cadáver a los postres (Murder by Death, 1976, Robert Moore) o la huella (Sleuth, 1972, Joseph L. Mankiewicz), reconoceremos en ellas algunas de las intenciones de Knives Out, que sin embargo no les llega a la suela de los zapatos a esos dos colosos.
Si dejamos aparte las comparaciones, Knives Out es una película amena y altamente disfrutable, con buenas interpretaciones, una trama enrevesada, una familia variopinta y giros inesperados.
Es muy de agradecer ver a Daniel Craig interpretando a un detective menos frío y letal que nuestro amado 007. La película avanza a buen ritmo, y hay suficientes pistas y cabos sueltos como para que nunca llegues a dar nada por hecho. Ingenio, risas y personajes entrañables. Muy recomendable.
