Hoy os traemos una propuesta multidisciplinar con la poesía como principio y detonante. Un poema que da lugar a reacciones, a diálogos, a obras de lo más diverso. Estamos hablando de re-code, un proyecto de Myriam Soteras.
Para quien no la conozca, Myriam Soteras es editora y poeta, y dedica todas sus energías a la edición y a la programación cultural. Autoedita la plaquette artesanal Rue Vaneau y colabora en publicaciones como La Charca literaria, La Ignorancia y Kopek. De ella se puede leer el poemario Papel de lija (Edicions Tremendes, 2022).
¿Qué es re-code? Pues es un único poema. Y, a la vez, un poema que los contiene todos. Es una potencia. Un deseo. Un imposible.
Este proyecto nació en la Fundació Brossa, creció en el Convent de Sant Agustí y se ha reproducido en El Taller 131. Y en definitiva, se condensa en una pregunta: ¿Cómo se traduce un poema a un lenguaje verdaderamente universal? Y no es una pregunta retórica.
Por si no fuera suficientemente compleja y abstracta la cuestión, en su afán de responder la pregunta (o multiplicarla exponencialmente), Myriam se ha rodeado de un grupo de creadores, invitándolos a hacer su aportación a esta reflexión de aires borgianos.
El punto de partida para la creación colectiva es el poema ‘Vocabulario’ de la propia Myriam Soteras, con el que cada participante ha tenido que interactuar libremente, desde su lenguaje, desde su mundo. Al final de este artículo, encontraréis íntegro el poema en cuestión.
Son 23 propuestas artísticas interdisciplinarias. 23 visiones desde diversas disciplinas: un experimento inconcluso a la búsqueda del lenguaje universal.
¿Y cómo se materializa este diálogo tentacular? Pues a partir de una exposición y de varias sesiones en directo. Habrá una paleta de registros amplísima: desde las el recital de la poeta y cantante Anna Pantinat hasta la danza de Vanesa Gálvez, pasando por la reflexión pictórica de Sergi Viader.
Todo ello ocurrirá este mes de octubre en el Taller 131 (Santa Elena, 8). La inauguración es mañana, 19 de octubre a las 20.00, y habrá eventos los jueves sucesivos. Más información en el perfil de Instagram del Taller 131 (@eltaller131).
Por último, te dejamos con el poema que lo ha desencadenado todo:
Vocabulario
Decir la muerte
como la dicen los cocos en el aplauso de las cáscaras vacías:
galopando caballos.
Hablar el lenguaje de las ostras.
Lento.
De arena, caricia, saliva.
Decir, en el lenguaje de las ostras:
Perla.
Escribir el aire y la lluvia
con la caligrafía de las nubes;
siendo el aire y la lluvia
y ninguno.
Pronunciar el tiempo todo junto.
Como la primera pregunta
de una araña recién eclosionada.
Y luego
hilarlo.
Entender la palabra madre
igual que la entienden los pulpos,
sin haberla oído nunca.
Conocer el significado del vacío
según el diccionario de los agujeros
en el que todas las palabras
quieren decir lo mismo
y nada.
Callar.
Como un poema escrito en una
lengua muerta.