Hoy hablamos de un producto inclasificable pero absolutamente recomendable. El formato es de lo más sencillo, mientras que el contenido es absolutamente delirante. Es un ejercicio de comedia en el que cuatro cómicos se sientan a hacer una tertulia sobre los mejores libros del año, con un pequeño gran detalle… esos libros no existen.
Si te gustan los falsos documentales en cine, o si eres fan del maravilloso libro La literatura nazi en América de Roberto Bolaño, esto te va a gustar. Para quien no lo conozca, el ingenioso libro de Bolaño utiliza un formato clásico (el manual de literatura) para elaborar una colección de biografías y reseñas dedicadas a la vida y la obra de autores que no existen, en una parodia sensacional de la literatura iberoamericana.
Pues bien, Literaturium hace lo mismo, pero en un formato distinto. Parodiando un programa de radio o podcast de literatura, cuatro genios de la comedia hacen balance de lo mejor del año, con resultados absolutamente desternillantes.
Los artífices de este repertorio de disparates son los prolíficos cómicos Ignasi Taltavull, Tomàs Fuentes, Enzo Vizcaíno y Álex Martínez Vidal. Los dos primeros son los creadores del podcast La Ruina, del cual ya os hablamos en su día.
Poniéndose en la piel de cuatro literatos devoradores de libros (uno de los cuales llega a decir que se ha leído todos los libros publicados ese año), van desgranando cuáles han sido los libros que más les han gustado y los que menos.
«Nacer por primera vez es volver a nacer».
Doloyevsky Boluda, del libro Memorias de neonato
Los títulos que encontraréis aquí son absolutamente delirantes, así como los nombres de los autores, como por ejemplo El apechusque del diablo de Sildurfo Garimbas, El casoplón encantado de Kike Papalluna o Mindfulness para hijos de puta, de Carolina Tirititaun. Sin olvidar el ganador absoluto, Gárgaras de pasión, de Encarnita Nakamura.
Da mucho la impresión de que no está guionizado, de modo que los cómicos no saben qué van a decir los demás, y aunque hacen todo lo posible por aguantarse la risa, es una causa perdida.
Además, entre ellos se van lanzando correcciones y preguntas que son provocaciones para improvisar, siempre con resultados risibles. Se dan pie a introducirse en temas de lo más variopinto o en las tramas de las novelas, y con sus intervenciones improvisadas van hilvanando un discurso tan sólido como absurdo, con muchos momentos de “a ver quién dice la burrada más grande”.
En resumen, un formato sensacional, con títulos ingeniosos y grandes momentos de comedia. Y si te ha gustado, no te pierdas la versión cinematográfica, CINEMATORIUM. Todo esto lo podéis ver en el canal de YouTube llamado Culturium Club.