‘El poder del perro’, de Jane Campion. En el nombre de la madre
Ha llovido mucho desde El piano (1993), la película más conocida de esta veterana realizadora neozelandesa que puso de moda -y nos hizo, por tanto, padecer hasta lo indecible- el minimalismo en las bandas sonoras cinematográficas. Mucho ha evolucionado desde entonces su estilo, desde aquél formalismo algo forzado (y que llegaría a su paroxismo en