‘El mal no existe’, de Ryusuke Hamaguchi. Antes que el diablo sepa que está vivo
La última película de Hamaguchi (Happy Hour (2015), Drive my car (2021)) resulta perversa desde su mismísimo título. Porque si vas a ver una historia que proclama algo tan palmariamente falaz como eso (que “el mal no existe”) te pones en guardia desde el minuto uno. ¡Por supuesto que algo entre malo y muy malo